EDITORIAL – Régimen | En el Día de la Bandera el macrismo entregó la soberanía argentina.

Redaccion junio 25, 2018 0 Comment

Los responsables del endeudamiento por un siglo. Dujovne, Macri y Caputo. Ahora hasta las monedas se harán en Gran Bretaña y España.

Por Daniel do Campo Spada
(TV Mundus)

El Día 20 de junio de 2018 quedará en la historia como el día de la entrega de la soberanía de la República Argentina a manos del Fondo Monetario Internacional. A la mala noticia no solo hay que agregarle la aceptación del Directorio del organismo multilateral sino que además el país fue calificado como mercado emergente con todo lo negativo que ello implica. Paradójicamente se conmemoraba la muerte de Manuel Belgrano, el hombre más importante de la independencia junto a José de San Martín. Mauricio Macri, titular del régimen, dijo que era una buena noticia.
El Directorio del FMI aceptó la propuesta hecha por el Ministro de Economía Nicolás Dujovne y condenó al país a entregar la soberanía económica ya que volverá a tener un piso de oficinas propio en el edificio del Banco Central de la República Argentina (BCRA) que conduce el corrupto offshore Luis Caputo. Cada tres meses se debe auditar las medidas exigidas por ellos, mas allá de que hayan querido engañar diciendo que el plan es de la Casa Rosada. Eso lo pactaron cuando Christine Lagarde (Presidenta del organismo) llegó a Buenos Aires y cenó en la casa del Ministro.
Macri y el FMI dispusieron las medidas que adelantáramos ya en el número 66 de la revista ECO Informativo (Noviembre 2015) avanzando sobre los derechos laborales, previsionales y sociales. Los ricos del país, clase corrupta como pocas, seguirá haciendo la mayor transferencia de ingresos en favor de los más favorecidos perjudicando al pueblo argentino.
El Fondo de Garantía Sustentable (FGS) podrá ser liquidado en forma definitiva, devolviéndole las acciones a las empresas en las que el Estado tenga alguna participación obtenida con la liquidación de las Administradoras de Fondos de Jubilaciones y Pensiones (AFJP). Una vez concluido ese vaciamiento, el sistema previsional será inviable y solo podrá repartir jubilaciones y pensiones miserables (aún peor a las actuales). Ello abrirá nuevamente la puerta al sistema desigual de un sistema de ahorro privado que perjudica a los sectores menos favorecidos.
En el tema de reforma previsional el FMI ordenó llevar la edad jubilatoria a los 70 años para las mujeres y 75 los hombres, tanto para hombres como para mujeres, eliminando definitivamente las pensiones. Además de esto último, que ya comenzó haciendo en la Ley de Reparación Histórica el macrismo busca desmantelar el PAMI con forma de reducir gastos. Los ancianos quedarán a su suerte o a la de la ayuda que le puedan dar en forma particular los allegados.
Los fondos a las Universidades Públicas serán recortados en forma brutal, provocando el cese inmediato de 7 mil puestos de trabajo, fundamentalmente de aquellos que trabajan en tareas de extensión universitaria. En muchos de estos casos los implicados directos son aquellos que trabajan en la acción social y en los medios de comunicación.
Además Mauricio Macri ordenó el plan de factibilidad para reducir, cerrar o privatizar Aerolíneas Argentinas, Tandanor, FADEA, Radio y TV Argentina, Casa de la Moneda y Yacimiento de R{io Turbio. En el caso de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), la están desdoblando en gas, electricidad y petróleo para dejarla más factible para ser puesta en manos privadas. La inglesa Shell, de la que era accionista el ex Ministro Juan José Aranguren es la primera en la lista para quedarse con lo que fue la principal empresa nacional.
El ajuste del PBI debe ser de 3,7 % en el primer año. Eso implicará la reducción de planes sociales e infraestructura con directo impacto en salud y educación. La forma de instrumentarla es a través de achicar las transferencias a las provincias en un 74 %. Los gobernadores condicionarán este ítem al voto de sus Senadores en la discusión del Presupuesto 2019.
Además, en el mismo día dedicado a la memoria de Belgrano, Argentina fue considerada como “país emergente”, lo que implica quedar sujeto a normativas especulativas que ningún gobierno puede impedir. Para no volver a ser “mercado frontera” no se puede intervenir en el mercado cambiario ni regular el flujo de capitales hacia el exterior. De esta forma está dado el combo necesario para la fuga de capitales. La primer remesa del FMI por u$s 7.500 millones de los u$s 50.000 millones asignados podría fugarse en los primeros días, dejando la deuda al Estado mientras la corrida cambiaria favorece a los especuladores de siempre.