EDITORIAL – Política | Macri apeló a la manipulación digital de los ciudadanos argentinos.

Redaccion abril 02, 2018 0 Comment

Por Daniel do Campo Spada
(TV Mundus)

La protección mediática que recibe el Presidente Mauricio Macri ha impedido que en la Argentina el tema del espionaje a los usuarios de internet tuviera la trascendencia que ha tenido en otros países. El PRO es el primer partido que se ha valido de urgar en la intimidad de los ciudadanos para hacerse del poder en un plan que confiesan quieren prolongar hasta 2020. Una denuncia de la ONG Amnistía Internacional (AI) que involucra a Facebook tomó repercusión global menos en el país rioplatense.
La denuncia de AI fue acompañada por los periódicos New York Times y The Observer en donde develan que la empresa Cambridge Analytica vende el servicio a los grupos políticos que quieren favorecerse de las herramientas digitales para llegar al poder y manejar la opinión pública. Apelando al manejo de algoritmos diseñaron un software capaz de diseñar perfiles de usuarios y trabajar sobre sus miedos latentes. Más que por la esperanza alientan los miedos porque los mismos son más irracionales que los deseos. En el temor solo se actúa por reacción ante una amenaza, sea esta real o ficticia. Los deseos se planifican y analizan un poco más. Por eso durante todo el último gobierno peronista 2002-2015 las corporaciones de derecha llevaron adelante una demonización contra todos los que participaron en el último gobierno popular argentino.
Los test de personalidad que se establecen desde Facebook permiten a los contratantes manipular la voluntad de los ciudadanos ya que reciben mensajes diseñados, donde no se descartan las noticias falsas (ahora llamadas Fake News). Los mensajes aparecen en el momento adecuado a cada usuario rastreado por la red social de mayor penetración a nivel mundial. En el caso argentino Macri fue el contratante de estos servicios obteniendo dos victorias electorales en los últimos dos años. En esos mecanismos piensan apoyarse para instalarse por varios períodos más.
Una filtración filmada con una cámara oculta del Channel 4 de la BBC de Londres permitió conocer que un funcionario de Cambridge Analytica se jactaba de trabajar con pleno éxito en 16 países. Entre ellos la Argentina y la campaña de Mauricio Macri con el PRO. En casi todos los casos los favorecidos fueron partidos de ultraderecha, capaces de reunir el dinero suficiente para pagar semejante maquinaria de la información.
El PRO, con la batuta del publicita Jaime Durán Barba apela a la campaña sucia desde que Macri fue elegido para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en 2007. Nunca dejó de espiar telefónicamente a la oposición política, la sindical y hasta a su propia familia. También largó campañas sucias como cuando por una “encuesta” telefónica acusó al padre del candidato peronista Daniel Filmus de ser arquitecto y tener una constructora que se beneficiaría con la obra pública cuando en realidad es apenas comerciante del barrio de Once. Cuando se descubrió la falsedad el PRO ya había ganado y nadie se preocupó por el tema y sus aclaraciones.
Lo importante es manchar, como cuando hicieron el sospechoso montaje de los bolsos de López (ex funcionario peronista) quien los arrojaba a un monasterio de monjas, mientras en el Congreso se le daba media sanción a la reforma previsional que un año después se haría ley. O la falsa novia de Néstor Kirchner que llevaba bolsos con plata a Santa Cruz desmentida después y de lo que nadie se enteró y así sucesivamente. Se acusa, se miente y listo. Total nadie chequea ni ve. Nadie ve las empresas offshore del propio Presidente y el hecho de que todo su gabinete ha hecho fortuna en forma sospechosa y encima tiene “su” dinero en el exterior. Y a nadie parece importarle, porque la manipulación disimula el tema.
Mauricio Macri tuvo varias reuniones con los directivos de Facebook, tanto en Buenos Aires como en Estados Unidos y en Davos, lugares donde les ha cedido junto a Google hasta la bases de datos fiscales de todos los ciudadanos argentinos. La contraprestación es la ayuda para perpetuarse en el poder gracias a la posibilidad de marcar agenda, imponiendo sus mensajes y anulando todos aquellos que hablen algo malo del régimen.
En las redes sociales los cibernautas son ingenuos. Muestran sus intimidades personales, familiares y económicas. Además es un espacio que se ha convertido en una nueva asamblea, una ciberpolis de la que los más avanzados se encargan de manipular. Si los que navegan por internet no son un poco más desconfiados esta manipulación que además se prolonga a Twitter, Google, Instagram y otros etcéteras serán quienes realmente decidan nuestro destino.