EDITORIAL – Régimen | Se cumplen dos años del peor Gobierno de la democracia.

Redaccion diciembre 10, 2017 0 Comment

En forma organizada y espontánea los rosarinos le mostraron su rechazo a Macri. FOTO: YPF Nacional y Popular

Por Daniel do Campo Spada

El 10 de diciembre de 2015 asumía el Presidente Mauricio Macri el poder en la República Argentina. Con bailecitos mal llevados y una alegría de irritación propia de los derechistas comenzaba el último período de la democracia. El 7 de diciembre de 2017 Mauricio Macri era el responsable de terminar con 34 años ininterrumpidos de democracia. Hay presos políticos por primera vez, muertos a manos de fuerzas del Estado, inteligencia interior como en la época de la dictadura, censura en los medios de comunicación, millones de nuevos pobres y desocupación en aumento, tropas extranjeras en territorio nacional, avance de los carteles del narcotráfico, miles de empresas y comercios cerrados, fin de los planes sociales, destrucción de la industria, fuga de científicos, caida de los sistemas públicos de previsión, salud y educación, endeudamiento externo hasta para los próximos cien años. ¿Algo màs? Podemos seguir con un submarino hundido por Estados Unidos en maniobras no aprobadas por el Congreso, uso de bases aéreas para empresas privadas, entrega de los satélites argentinos a conglomerados norteamericano-europeos y así, en una larga y lamentable lista.

Macri hizo que el Estado asumiera todas las deudas con organismos extranjeros solicitadas por empresarios privados como Mauricio Macri entre otros.

Ya en enero de 2016, a poco menos de un mes de asumir el régimen mostró lo que se venía. Con camiones hidrantes yu por la fuerza terminaban con al Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) y le entregaba todo el poder a los mismos grupos oligopólicos que sostuvieron y crecieron fuertemente durante la más sangrienta dictadura (1976-1983). A los pocos días comenzaron con su lista de presos políticos al encarcelar sin causa a Milagro Sala, emblema de las organizaciones sociales que a cientos de miles les devolvieron la dignidad a pueblos ancestrales o a los desplazados del menemismo. Hoy la lista de persecusión política se alarga a varias integrantes de la Tupac Amarú, los ex funcionarios Héctor Timerman, Amado Boudou, Carlos Zannini, dirigentes como Luis D´Elía y Yussuf Khalil buscando detener a la que es la líder política de la oposición con más fuerza que es la flamante Senadora y ex Presidenta Cristina Fernández. Aunque haya perdido por escaso margen ante el más poderoso conglomerado gubernamental-mediático-masónico-sionista-judicial que se recuerde, es la única capaz de generar movilizaciones espontáneas donde quiera que vaya. Por el momento los fueros parlamentarios la mantienen en libertad.
En solo dos años el PRO junto a sus socios de la UCR y la Coalición Cívica (monopartido de Elisa Carrió) terminaron con el Estado de Derecho. Hoy todos los argentinos estamos en libertad condicional hasta que el gobierno judeo-empresario-masónico decida que uno debe callarse. Ni siquiera Carlos Menem se atrevió a silenciar voces como en la actualidad. Se cerraron medios de comunicación opositores al tiempo que se favorece indiscriminadamente a los derechistas. Se han silenciado voces (entre las que está quien esto escribe) y está prohibido hasta opinar en las redes sociales (en solo dos años tres personas han ido presas por usar un twitter. Se sacó de la televisión a dos de los líderes de opinión más seguidos de la televisión (Víctor Hugo Morales y Roberto Navarro) por el solo hecho de denunciar las arbitrariedades y corrupción del macrismo.
En el Estado se han despedido a miles trabajadores y se cuentan por miles las empresas (7.220) y comercios (18.127) que han cerrado en todo el país. A los jubilados se les sacaron los subsidios a los servicios y los remedios pagos al tiempo que jubilarse hoy es casi imposible para quien haya trabajado algunos años en negro o en cuentapropia. Además se han suspendido 170 mil pensiones a la invalidez.
Hemos perdido la soberanía en la polìtica exterior ya que se ha producido gratuitamente un alineamiento con el régimen norteamericano y la comunidad judía de Tel Aviv, espacios terroristas internacionales que invaden paises como si fueran propios o someten a poblaciones desde hace décadas como es el caso de los sionistas en Palestina.

Pérdida de derechos laborales y represión para el pueblo y más ganancia para las clases ricas.

Sin duda alguna es una dictadura distinta, de nuevo cuño. Llegó con el voto de los ciudadanos, los mismos que ven como pierden derechos día a día y a pesar de ello lo sostienen. El dictador Jorge Videla probablemente también habría ganado en las urnas en 1976, no nos engañemos. Lamentablemente los ciudadanos en algunos momentos históricos necesitan hambre, represión y sangre para darse cuenta de lo que han hecho. La historia universal lo demuestra. Benito Mussolini, Adolf Hitler, Álvaro Uribe, Sebastián Piñera, Collor de Mello, Ángela Merkel, Mariano Rajoy y cientos de casos muestran que los ciudadanos de a pie terminan votando en contra de sus popias vidas. ¿Por qué Macri sería la excepción?