REGIÓN – Brasil | Nuevo canciller de Brasil fue un ‘socio estratégico’ de Chevron, afirma diario ecuatoriano
Con el título de “El nuevo canciller de Brasil fue un ‘socio estratégico de Chevron’, el diario ecuatoriano El Telégrafo revela el vínculo de Serra con esa compañía petrolera y los objetivos de este en su nuevo puesto, al que llegó tras una carrera política que incluye su derrota como aspirante a la presidencia en 2002 y en 2010.
Según Pablo Giuliano, corresponsal del rotativo desde Sao Paulo, Serra será el primer no diplomático al frente del Palacio de Itamaraty y tiene la premisa de darle el golpe de gracia a la política Sur-Sur del gigante estadounidense y retomar el comercio con Estados Unidos, desplazado por China como el principal socio comercial del gigante sudamericano.
Su intención, señala el reportero, es reducir al mínimo el proyecto que siempre combatió, el Mercado Común del Sur (Mercosur) porque impide a Brasil firmar unilateralmente acuerdos de libre comercio, y alerta que el presidente interino lo nombró canciller porque fue quien más trabajó para crear un proyecto paralelamente al de Dilma Rousseff en las sombras, durante encuentros en casas de jueces y parlamentarios, en Brasilia.
“Serra comparte no apenas el gobierno con Temer, sino los archivos de WikiLeaks en los cuales aparece defendiendo intereses no tan brasileños”, comenta el articulista.
Añade que precisamente Serra, según los cables del consulado de Río de Janeiro revelados por WikiLeaks, es el candidato presidencial que en 2010 le prometió a Chevron que iba a cambiar la ley petrolera sancionada por Luiz Inácio Lula da Silva que imponía el régimen de división de lucros y abandonaba el de las concesiones y le daba a Petrobras un mínimo del 30% en la extracción de los campos submarinos.
Esta información, agrega, apareció sin fuerza en los medios en diciembre de 2010, cuando Lula da Silva se preparaba para pasarle el mando a Rousseff, pero ahora gana fuerza porque fue Serra el año pasado quien presentó un proyecto, con el aval de Temer, para reducir a Petrobras de la extracción petrolera y la apertura a los players extranjeros.
“Mirá, deja a los del Partido de los Trabajadores (PT) hacer lo que quieran por ahora… el modelo actual no va a durar mucho. Nosotros lo volveremos a cambiar”, le dijo Serra, según un cable del consulado estadounidense en Río de Janeiro en 2009, a Patricia Pardal, entonces directora de relaciones con el gobierno de Chevron.
Según el cable, Serra iba a impulsar, en caso de que venciera a Rousseff, el cambio en la legislación de hidrocarburos como quería Chevron. Pardal, de Chevron, le contó su acción de cabildeo con el candidato presidencial opositor a los representantes económicos del consulado estadounidense en Río de Janeiro, de acuerdo consta en WikiLeaks.
¿Corruptos al gobierno de Brasil?
Advierte El Telégrafo que el equipo Temer tiene credenciales para mostrarse eficiente, pero no es un modelo de honestidad, ya que al menos tres ministros son investigados en el fraude a la petrolera estatal Petrobras, el mayor caso de corrupción de la historia de Brasil, entre ellos destaca Romero Jucá, ministro de Planificación y presidente del partido de Temer, el centrista PMDB.
El sitio especializado Congresso em Foco, que sigue de cerca las deudas de los políticos con la justicia, detalló que otros dos son hijos de políticos investigados en ese caso y tres enfrentan distintos casos penales.
Por su parte, la agencia AFP publicó que, por otra parte, el gabinete de Temer parece un regreso a mediados del siglo XX porque no hay mujeres, no hay negros y ninguno tiene un perfil cercano a las masas de los más pobres.
En tanto, este domingo, la agencia cubana Prensa Latina señala desde Brasilia que el nuevo ministro brasileño de Salud, Ricardo Barros, enfrenta investigaciones por corrupción, malversación y delitos contra la Ley de Licitaciones, de acuerdo con la Red Brasil Actual.
Esa fuente señala que Barros, tesorero del Partido Progresista (PP) y cinco veces electo diputado federal, Barros debió también responder ante la justicia durante su época de alcalde de la ciudad paranaense de Maringá, en la década de 1990.
Por entonces, detalló la fuente, el nuevo titular de Salud designado por el presidente interino Michel Temer fue condenado por el Tribunal de Justicia estadual por fraude en la venta de colectores y compactadores de basura y debió retribuir a las arcas públicas más de un millón de reales.
Barros recurrió la medida ante el Supremo Tribunal de Justicia, que le negó el recurso en febrero de 2014.
El flamante ministro también fungió como secretario de Industria y Comercio do Paraná a partir de 2011, pero pidió licencia del cargo después de recibir denuncias por irregularidades en su gestión al frente de esa cartera.
Por su parte, desde Sao Paulo, la articulista Raquel Seco reportó al diario El País que el 60% de los senadores que juzgan a Rousseff y casi el 54% de los diputados tienen o han tenido cuentas pendientes con la justicia.
Precisó que la Cámara de Representantes brasileña tiene a 273 de sus 513 diputados implicados en causas judiciales, según datos de la organización Transparência Brasil, la que señaló que existen cargos por corrupción, pero también por extorsión y tortura o por portar armas de fuego.
En tanto, en el Senado, el 60% de los 81 miembros tiene causas pendientes con la Justicia, sobre todo por delitos electorales y corrupción, según la plataforma Atlas Político.
El líder de la comisión especial del Senado que estudia el impeachment, Antonio Anastasia, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), ha enfrentado acusaciones de cometer el mismo tipo de irregularidad atribuido a la presidenta.
PL/El Telégrafo/yp
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