La Columna de Hugo de la Riva| DAVOS: CUMBRE DEL CEO-CAPITALISMO

Mauricio Macri y el falso opositor Sergio Massa.

Hace algunos días los medios dominantes nos hicieron saber que el Presidente Mauricio Macri viajará a Suiza para participar de la cumbre de Davos, que se realizará entre el 20 y 23 de enero del naciente 2016.

Desde la retórica emanada de las conferencias de prensa del líder de CAMBIEMOS y su Jefe de Gabinete Marcos Peña, que le dan tanta alegría a los paladines del “queremos preguntar”, se señala que el objetivo del vuelo a la tierra de los mejores relojes por parte de la comitiva nacional encabezada por el flamante mandatario, acompañado por el dirigente oficialista camuflado de opositor Sergio Massa, es reingresar al mundo para recibir inversiones generosas que reactiven la economía del país. Ante esto, usted puede preguntarse ¿dónde está el problema?
Una respuesta válida necesitaría enmarcar qué es exactamente este Foro Económico Mundial. Le cuento entonces: la cumbre de Davos representa el paradigma del capitalismo más reaccionario que se pueda encontrar en el Mercado de las ideas político-económicas. Es allí donde los CEOS de los principales grupos económicos y financieros (JP Morgan, Deutsche Bank, Banco Galicia, HSBC, Facebook, Microsoft, Yahoo, Google, Visa, entre otros) definen junto con los referentes políticos de las potencias globales (John Kerry – Secretario de Estado de EE.UU. -, Joachim Gauck y Benjamin Netanyahu – Presidentes de Alemania e Israel respectivamente -, entre otros) hacia qué rumbo tiene que dirigirse la geopolítica mundial. Y en esta ocasión lo que se va a plantear es cómo lograr que el rol de los Estados-Nación decrezca dentro del sistema basado en el capital.
Dicho esto, la duda que usted puede tener es ¿cómo se consigue decrecer un Estado? Una contestación posible puede ser elegir para los principales roles de la administración del Estado (en su concepción estatal no se gobierna, se administra) a CEOS o Managment de los principales grupos económicos: Francisco Cabrera, Ministro de Producción y miembro del HSBC, Alfonso Prat Gay, Ministro de Hacienda y parte del JP Morgan, Luis Ribaya, Directivo del Banco Nación y hombre del Banco Galicia. ¿Le suena?
Pero también hay más formas de reducir el Estado: echar trabajadores masiva y velozmente de la mayoría de las áreas sociales (cerrar dependencias que traten la problemática de la violencia de género), económicas (disminuir los recursos humanos de entes que recauden y manejen los fondos públicos), culturales (cerrar y remover personal de centros culturales a pequeña y gran escala) y gubernamentales (cortar cabezas de trabajadores del Congreso Nacional).
Frente a esto, y tras haber desarrollado este panorama, usted puede plantearse esta incógnita ¿Y Macri? ¿Qué papel jugará allí? ¿Qué propondrá? Sencillo: dirá que es capaz de garantizar gobernabilidad en su territorio. Esto quiere decir que hará todo lo que tenga que hacer para que las políticas económicas pergeñadas por los popes del CEO-Capitalismo se lleven a cabo: decretos a mansalva, ningunear al Congreso Nacional, saltear la Constitución, formar una alianza estratégica con los miembros más poderosos de la Justicia, reprimir la protesta social y, sobre todo, endeudarse en dólares con los mismos actores que, oh casualidad, son los invitados de elite de la Cumbre de Davos.
Y bien, después de todo esto, quizá usted esté algo abrumado y pueda decirme que es muy complejo el tema. Entonces se la hago más fácil: CEO-Capitalismo significa que los poderosos ahora no sólo manejan las corporaciones económico-financieras sino que además se hacen cargo, personalmente, de los Estados. O sea, están de los dos lados del mostrador del bar, lástima que nunca quieren invitar al pueblo.